Si desea
comprar o vender una propiedad y busca una inmobiliaria en Gondomar, por favor
acceda a www.jesuscordeiro.es . En Jesús Cordeiro Consultor Inmobiliario somos una inmobiliaria
en Gondomar y nos gustaría poder ayudarle.
Al suroeste de la provincia de
Pontevedra nos encontramos con un rinconcito un tanto peculiar, es un lugar
especial por sus antepasados, sus yacimientos, sus calles, por su gastronomía
gallega, pero sobre todo por la acogida que te da la gente de este municipio se
llama Gondomar. Se encuentra situado en el entorno natural del Val Miñor, justo
entre la ribera del río Miñor y la Serra do Galiñeiro, a unos 20 kilómetros de
Vigo.
Aunque Gondomar no tiene playa es
un lugar excelente para quedarse, es más tranquilo para la gente que les gusta
esta zona, a 4 km nos encontramos con Baiona y la Playa América.
El municipio de Gondomar es rico en
yacimientos arqueológicos. Del paleolítico han aparecido en Chan do Cereixo más
de 200 útiles de cuarcita tallada. Se encontraron dólmenes como el de Chaín,
petroglifos como el de Pedra da Moura y Castros como el de Xiánm, todos estos
hallazgos nos indican que estas fueron testigos de asentamientos desde épocas
remotas. Mientras que de la presencia romana, solo han encontrado algún
mosaico, no hay muchos datos.
Durante la Edad Media se repartían
las tierras de Gondomar entre las diversas familias nobles, en esas tierras se
construyeron grandes pazos que siguen a día de hoy conservandose, como los de
Gondomar, Villarés o Pampillón. Los nobles que recibían estas tierras y
construían los pazos eran los que tenían el poder y la producción.
A principios del Siglo XX, los
vecinos buscan fortuna en la emigración. Los que se quedaron, trabajaron estas
fértiles tierras que hoy dan de comer a muchas de sus gentes, celebrándose
importantes ferias donde se comercializan todos estos productos. En la
actualidad, además de esta riqueza agrícola, la ganadería y las industrias
madereras son las otras fuentes principales de ingresos.
Una de las curiosidades es que en
Gondomar se rodó la serie “Los pazos de Ulloa”, de Emilia Pardo Bazán.
Que ver en
Gondomar
Pazo del
Conde de Gondomar
En el centro de Gondomar nos encontramos con El Pazo de Gondomar, su construcción data del siglo XVI-XVIII con restauración en el XIX, se construye sobre sobre una edificación que ya existía, una fortaleza medieval, posiblemente del siglo XIV. En él vivía la familia de Diego Sarmiento de Acuña, titulo otorgado por Felipe III. En el año 1665, los portugueses lo asaltan. Fue destruido por un incendio en el siglo XVIII. Posteriormente, fue adquirido y restaurado en el siglo XIX por la condesa de Gondomar, cuyos descendientes lo habitan en la actualidad. En este pazo nació el Conde de Gondomar, el cual llegó a ser nombrado embajador de España en Londres.
Durante esta época el edificio
destaca su apariencia defensiva, que se la dan las murallas que llegaban hasta
las mismas puertas de lo que hoy es la Casa Consistorial, también los
torreones. De la construcción que se hizo primera aún se mantienen varias columnas,
el gran balcón, la capilla y varios de los muros laterales y eso que en el
siglo XVIII un incendio causó graves daños en el pazo, que sería restaurado en
el siglo XIX por los sucesores del noble gallego, que ya estaban emparentados
con uno de los linajes más prestigiosos de la nobleza española, los Fernández
de Córdoba, descendientes del Gran Capitán, con lo que este condado se unió a
los títulos del ducado de Medinaceli. El Pazo del Conde de Gondomar es un
monumento declarado Bien de Interés Cultural por la Xunta de Galicia.
Iglesia de San Benito de Gondomar
Es la iglesia más representativa de
Gondomar, no por eso las demás son menos importantes. La Iglesia de San Benito
de Gondomar fue declarada bien de interés cultural con categoría de monumento.
Sus orígenes son de la Edad Media, pero se reconstruyó varias veces y se
terminó haciendo parte de estilo neogótico con influencias ojival en el siglo
XIX.
Monte
Galiñeiro
El Monte Galiñeiro es el punto más alto del municipio de Gondomar, con algo más de 700 metros. En el camino de la cima, podemos ver manadas de caballos pastando en estado salvaje. Al llegar arriba, divisamos buena parte de Vigo, su ría y entorno.
En las laderas del Monte Galiñeiro, como en otros lugares de Galicia, manadas de caballos viven durante todo el año en estado salvaje gestionadas por las comunidades de vecinos. A finales de la primavera se celebran los típicos curros o ‘rapa das bestas’, en los que estos vecinos suben al monte para traer a las manadas, clasificar los animales y marcarlos en una hermosa lucha entre el hombre y la bestia.
En este monte se encuentran los
grabados rupestres más importantes del municipio: los petroglifos de Auga da
Laxe, donde se representan los distintos útiles de aquella época. Además de
estos grabados, en la parroquia de Morgadáns podemos encontrar los monumentos
funerarios más importantes del municipio: las mamoas de A Chan de Prado. Se
trata de siete tumbas colectivas de grandes dimensiones.